La moda, es un ARTE, pero también un negocio que mueve millones de euros todos los años. Y es por eso que ningún cabo debe de quedar suelto en este negocio, pero ¿quien sujeta las cuerdas de la moda? En el reportaje pudimos ver como las casas de moda pagan cifras astronómicas a las actrices para que luzcan sus diseños en la alfombra roja o sean la imagen de sus productos, eso si, decidiendo ellas como quieren el vestido que van a ponerse o como se hace la campaña publicitaria. Pero al mismo tiempo ellas se ven promocionadas en su carrera gracias a hacerse conocidas por todo el mundo.
Por otro lado las revistas que sacan la publicidad o hacen artículos en los que muestran las colecciones de las firmas ejercen un poder muy fuerte en la toma de decisiones a la hora de decidir que si y que no sube a la pasarela creando una especie de servilismo por parte de las firmas y los diseñadores hacia ciertas revistas. Caso es el de Vogue que decía que tejido debían llevar las chaquetas de Prada para que ellos lo sacasen en su revista o le aconsejaban a Óscar de la Renta que looks eliminar de una de sus colecciones.
Y todo esto para que después miles o millones de consumidores al rededor de todo el mundo decidan comprar esa moda de esas firmas.
Parecería que el diseñador se ve tan sujeto a los dictámenes de tantos grupos de poder que no le queda espacio para su propia imaginación y su desarrollo artístico.
Y lo curioso del asunto es que al final quien realmente manda es el consumidor a la hora de hacer que una firma de moda triunfe o desaparezca. Pero ¿seguro que deciden por ellos mismos?, ¿acaso no son las revistas, la TV o el cine los que nos hacen desear una u otro tipo de moda? Y, aunque no esté al alcance de nuestro bolsillo siempre aparece una copia a bajo precio o low cost que se las llama por parte de alguna de las las grandes empresas distribuidoras de ropa barata.
Al final de todo, el resultado es un sector que decide lo que todos debemos llevar y asegurarse así un buen beneficio. Quizás lo mas inteligente para estar en la moda es salirse de ella y crear nuestra propia moda, nuestro propio estilo y nuestra imagen personal e individualizada. En este mundo de globalización asusta ser diferente pero la esencia de las personas al igual que la de la moda o la de los diseñadores de moda radica en sus diferencias, su novedad y su aportación individual.
Por nuestra parte queremos que la moda sea un negocio que mantiene a millones de personas en todo el mundo pero que nunca deje de ser esa parte creativa, imaginativa, colorista y diferente que la hace pertenecer al mundo del ARTE.
Todo esto da mucho que pensar ¿no creéis?
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